Hoy se ha estrenado la ópera de cámara TENIM FEINA (Tenemos trabajo) con libreto inspirado en un sketch de dos personajes de mi obra «¡TENGO TRABAJO!», una comedia más bien negra sobre la precariedad laboral. Es el trabajo de fin de Grado de Xavier Casademont, alumno de Composición de la Escuela Superior de Música de Catalunya. Lleva trabajando en ella desde hace meses. La dirección escénica es de Anna Ponces y la dirección musical es de Ernest Martínez Izquierdo. La partitura, como he dicho, es de Xavier Casademont, que además ejerce de barítono solista. Alberto Espinosa es el tenor solista. Participa también la orquesta de la ESMUC. El estreno ha tenido lugar a las 19h en el Auditorio del Centro Cívico Fort Pienc de Barcelona. Como las localidades se agotaron enseguida y todavía había mucha gente con ganas de ver la obra, ha habido una segunda función a las 20h.

Durante mi formación como dramaturgo en la Sala Beckett, Sanchis Sinisterra nos propuso un reto a los alumnos de mi promoción (entre los que estaban Lluïsa Cunillé, Manel Dueso o Josep-Pere Peyró): utilizar las dependencias de ese lugar (oficina, sala de reuniones, almacén, lavabos…) para escribir una escena, siguiendo alguno de los modelos de escritura dramatúrgica que nos hacía seguir (y que ahora están publicados en el libro Prohibido escribir obras maestras, editado por Ñaque y el Institut del Teatre). La intención final era hacer una muestra al público, para que asistiera en pequeños grupos a las escenas que se realizarían en cada uno de los espacios de representación. Sin saberlo, estábamos sentando las bases de lo que más tarde serían las píldoras de Microteatro.
Yo elegí el despacho de Gerencia, donde convivían dos trabajadores de la Sala (el gerente y su ayudante). Y me imaginé una situación en la que acusaban la injerencia del espectador en su labor diaria, y eso alteraba su día a día. Por lo tanto, en la primera versión que presenté entonces no había ninguna cámara, sino que sencillamente el público entraba en el despacho donde actuaban los actores.

El montaje finalmente no se hizo, pero alrededor de esta pieza escribí otras, que conformaron la obra TINC FEINA!, que finalmente se publicó en la Colección Teatre-Entreacte de la Asociación de Actores y Directores Profesional de Cataluña (AADPC), que dirigía Enric Cervera. Fue publicada en mayo de 1997 junto con otra obra mía, Imagine (como la canción de John Lennon).
En esta ocasión, la acción empezaba con los personajes jugando a hundir barcos, y de repente un foco iluminaba al público. Y eso hacía que los personajes tomaran conciencia de su presencia, ya que no podía repetir el mecanismo de hacerlos entrar por la puerta en un pequeño despacho.

Por último, cuando la colección Teatre-Entreacte se dejó de editar y yo creé esta web para colgar las obras que me habían publicado en aquella colección, decidí hacer el cambio final: a los personajes ya no les altera la presencia del público, sino el descubrimiento de que existe una cámara que los vigila. El cambio pareció mucho más adecuado a los tiempos que corren. Al fin y al cabo, desde 1997 hasta nuestros días, el control sobre el ciudadano ha crecido exponencialmente y las condiciones laborales se han vuelto mucho más precarias. Y eso, lejos de crear un sentimiento de solidaridad entre los trabajadores, lo que ha provocado es una competitividad cada vez más salvaje.
Y este tipo de cosas me gusta contarlas en comedia, haciendo reír al espectador, para que en un momento dado se le congele la sonrisa en el rostro y se pregunte: «¿Pero de qué me estoy riendo?»

Le deseo lo mejor a este magnífico equipo, y especialmente a Xavier Casademont, que se perfila como un magnífico compositor, con gran personalidad y con muchas ganas de contar su visión del mundo a través de su arte.